DESDE MI CRUZ A TU SOLEDAD
Te escribo desde mi cruz a tu soledad, a ti, que tantas veces me miraste sin verme y me oíste sin escucharte.
A ti, que tantas veces me prometiste seguirte de cerca y sin saber porqué te distanciaste de las huellas que dejé en el mundo para que no te perdieras.
A ti, que no siempre
crees que te estoy contigo, que me buscas sin hallarme y a veces pierdes la fe
en encontrarme, a ti, que a veces piensas que soy un recuerdo y no comprendes
que estoy vivo.
Yo soy el principio y el
fin, soy el camino para no desviarte, la verdad para que no equivoques y la
vida para no morir.
Yo fui libre hasta el
fin, tuve un ideal claro y lo defendí con mi sangre para salvarte.
Sé que quizás tu vida te
parezca pobre a los ojos del mundo, pero yo sé que tienes mucho para dar y
estoy seguro que dentro de tu corazón hay un tesoro escondido: conócete a ti
mismo y me harás un lugar a mí.
Sí supieras cuánto hace
que golpeo las puertas de tu corazón y no recibo respuesta.
A veces también me duele
que me ignores y me condenes como Pílatos, otras que me niegues como Pedro y
otras que me traiciones como Judas.
Y hoy, te pido paciencia
para tus padres, amor para tu pareja, responsabilidad para con tus hijos,
tolerancia para los ancianos, comprensión para todos tus hermanos, compasión
para el que sufre, servicio para todos.
Quisiera no volver verte
egoísta, orgulloso, rebelde, disconforme, pesimista.
Desearía que tu vida
fuera alegre, siempre joven y cristiano.
Cada vez que aflojes,
búscame y me encontrarás; cada vez que te sientas cansado, háblame, cuéntame.
Cada vez que creas que
no sirves para nada no te deprimas, no te creas poca cosa, no olvides que yo
necesité un asno para entrar en Jerusalen y necesito de tu pequeñez para entrar
en el alma de tu prójimo.
No te canses de pedirme
que yo no me cansaré de darte, no te canses de seguirme que yo no me cansaré de
acompañarte, nunca te dejaré solo.
Aquí a tu lado me
tienes, estoy para ayudarte.
Te quiero mucho: JESUS.
Por gentileza de:
José Antonio Navarro
Por gentileza de:
José Antonio Navarro
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