EL AMOR NO DEBE NACER EN LA ARENA DE LOS SENTIMIENTOS QUE VAN Y VIENEN, SINO EN LA ROCA DEL AMOR VERDADERO, EL AMOR QUE VIENE DE DIOS

(Papa Francisco)

domingo, 31 de enero de 2016

HOY...EL EVANGELIO

SI NO TENEMOS AMOR...


Continuamos con el texto de Lucas del domingo pasado, en el cual presenta su programa y el “Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír”. Parece que en un primer momento, todos están de acuerdo en eso de la liberación de los pobres, el Año de Gracia y el anuncio de la Buena Noticia, pero en seguida llegan los desacuerdos: “¿No es éste el hijo de José?”, el hijo del carpintero. “Y Jesús les dijo: Sin duda me recitaréis aquel refrán: Medico cúrate a ti mismo: haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaúm”. Esperaban un Mesías todopoderoso y milagrero.
Jesús no piensa como ellos, les pone dos ejemplos de extranjeros, la viuda de Sarepta en el territorio de Sidón y Naamán el sirio, y les recuerda que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Se pusieron furiosos y le llevaron hasta en barranco a las afueras del pueblo, con intención de despeñarlo. La visión de Jesús, universal, amplia, que pide la liberación de los oprimidos, restaurar el Año de Gracia, le llevará a la muerte y este es el primer intento. Ayer como hoy, el camino del amor, de la justicia, en definitiva el camino de la fe, le cuesta abrirse paso: “se abrió paso entre ellos”, en nuestro pensamiento y en nuestros actos.
Será el amor, como les dice San Pablo a los Corintios, el sustento de todo: “Si no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o unos platillos que aturden. Si no tengo amor no soy nada. Si no tengo amor de nada me sirve”. Después de una preciosa definición del amor, termina: “En una palabra: quedan la fe, la esperanza, el amor: estas tres. La más grande es el amor”. Con frecuencia olvidamos que para que el hombre tenga fe en Dios, es bueno que empiece sintiéndose hombre, varón y mujer. El amor nos habla de encarnación, de punto de partida para asumir la obra salvadora de Dios, su anuncio de liberación. Sin amor es difícil entender el “Hoy se cumple”, estar con y por los pobres, esperar un mundo mejor.
La historia avanza y los grandes valores del Evangelio: la paz, la justicia, la libertad, el amor…, surgen también fuera de la Iglesia con una intensidad importante, y es que no son patrimonio de nadie. Al fin y al cabo, todo hombre es cuerpo espiritual y espíritu encarnado y aunque no sea consciente, está “religado”, busca la trascendencia por algún camino. Por eso, las menciones a los extranjeros que aparecen en el texto, a los no creyentes, a los de fuera, en ellos también se expresa el amor y aquellos principios del programa de Jesús leídos en la sinagoga de Nazaret.
Nosotros los cristianos encontraremos como Jesús resistencia en esta empresa, nos conocen, saben nuestros pecados, nuestras contradicciones y aunque no nos despeñen, muchos pensarán: ¿qué puede aportarme este que es uno como yo? Podemos escuchar con la primera lectura de Jeremías: “Te nombré profeta de los gentiles. Ponte en pie y diles lo que te mando. No les tengas miedo. Lucharán contra ti, pero no te podrán, porque yo estoy contigo para liberarte”. Debemos aceptar todos los riesgos e incoherencias que hay en nosotros, pero sabiendo que nos ha escogido y en ocasiones a pesar de todo, no tenemos más remedio que proclamar la Buena Noticia del Evangelio a los pobres y necesitados.

sábado, 30 de enero de 2016

HOY...

LO HONDO DEL CLAMOR



Fue durante el sosiego de la tarde;
las nubes se miraban en el río,
la brisa se escapaba del estío;
era el brillo del sol lejano alarde.

Sin sombra ni frescor que la resguarde,
desnuda de vestido y atavío,
aun sabiendo que vive su albedrío
se me estremece el alma, tiembla y arde.

¿Qué esperanza escondida es la que invoca?
¿Qué ilusión placentera la disloca?
¿Por qué no ve el nacer de su alborada?
Lentamente se aclaran los oscuros
y como fiel respuesta a su conjuro,
llega, fundiendo estrellas, la llamada.


Joaquín Fernández González.

viernes, 29 de enero de 2016

HOY...

EXTRAÑEZAS


¿No te parece extraño cómo un billete de 20€ "parece" tan grande cuando lo llevas a la Iglesia, pero tan pequeño cuando lo llevas a las tiendas?

¿No te parece extraño cuán larga parece una hora cuando oímos hablar de Dios, pero cuán corta cuando un equipo juega al fútbol por "solo" 90 minutos?

¿No te parece extraño cuán larga parece una hora cuando estás en la Iglesia, pero qué corta es cuando estás divirtiéndote en algún lugar?

¿No te parece extraño que no puedes pensar en algo que decir cuando rezas, pero no tienes ninguna dificultad en pensar cosas de qué conversar con un amigo?

¿No te parece extraño cuánto nos emocionamos cuando un partido de fútbol llega a la prórroga y se extiende un tiempo extra, pero nos quejamos cuando el sermón es un poquito más largo que lo usual?

¿No te parece extraño lo difícil que es leer un capítulo de la Biblia, pero qué fácil es leer 100 tweets o 100 whatsapps al día?

¿No te parece extraño cómo las personas desean los asientos del frente en cualquier partido o concierto, pero hasta se esfuerzan para buscar los asientos de atrás en las iglesias?

¿No te parece extraño que necesitemos 2 ó 3 semanas de aviso para incluir un evento de la Iglesia en nuestra agenda, pero podemos ajustar nuestra agenda para otros eventos en el último momento?

¿No te parece extraño lo difícil que es aprender una verdad simple del Evangelio para compartirla con otros, pero qué fácil es para las mismas personas entender y repetir un chisme?

¿No te parece extraño cómo creemos rápida y facilmente lo que dicen los periódicos y las redes sociales, pero cuestionamos lo que dice la Biblia?

¿No te parece extraño que todos quieran ir al cielo, siempre y cuando no tengan que creer, o pensar, o decir, o hacer alguna cosa que requiera esfuerzo?

¿No te parece extraño cómo podemos enviar miles de chistes por whatsapp y se esparcen como reguero de pólvora, pero cuando empezamos a enviar mensajes acerca de Dios, la gente lo piensa dos veces antes de compartirlos con otros?

Es extraño, ¿no te parece?...

No tengas miedo de hablar de Dios y dar gracias al Señor porque Él es bueno!

jueves, 28 de enero de 2016

HOY...

AL SALMO 70



Señor, en ti esperé muy confiado;

no sea para siempre confundido;

de tu justicia sea favorecido

y líbrame de mal y de pecado.


A ti clamo, mi Dios, muy angustiado,

inclina a mi clamor tu buen oído;

haz salvo a mí, tu siervo dolorido;

seré salvo, Señor, de ti guardado.


Tú eres mi virtud, mi fortaleza;

jamás, ni en mi vejez, me desampares;

tú seas mi paciencia, mi firmeza.



Tu suma bondad loen mis cantares;

publicará mi lengua sin tristeza

tu ley en todos tiempos y lugares.



Cristóbal Cabrera,(Siglo XVI).

Gentileza de Tiquín y Miguel

miércoles, 27 de enero de 2016

NOS VAMOS DE EXCURSIÓN


Ya van formalizando la inscripción para la excursión-convivencia los Sectores de León, Ponferrada-Astorga-La Bañeza, Palencia y Valladolid. Una buena ocasión para convivir los equipistas de la Región tres días, acercándonos a los monasterios marianos de la Rioja: Nuestra Señora de la Piedad, dominicas en Casalarreina, Santa María la Real (franciscanos) en Nájera y Santa María de San Salvador- monjas del Cister en Cañas-, al camino francés de Santiago, de este lado del Ebro, siguiendo las huellas del primer peregrino de nombre conocido, el rey Alfonso II el Casto en el Logroño, capital de la más actual ruta enológica, gastronómica y festiva acogida, al Camino de la Lengua, con las primeras palabras castellanas, las glosas emilianenses, S. Millán de la Cogolla.
Nuestra convivencia tendrá su punto fuerte en la fiesta ya tradicional en estos encuentros. Está diseñado este viaje para equipistas y amigos, Cuanto antes confirméis vuestra participación mejor para todos. A partir del día 5 de marzo, si no alcanzamos el número necesario, aceptaremos grupos que manifiestan su interés en acompañarnos.

El precio es de 195 €
Conviene formalizar la inscripción cuanto antes (plazo hasta el 5 de marzo).El anticipo de 50 € que se puede abonar en efectivo o ingreso en la cuenta de
                        Caja Duero:   2104 0232 8591 7029 2200
Indicar en el concepto: NOMBRE DE LOS PARTICIPANTES
                          
Pedro Pablo y M.ª Ángeles ABAD-HELGUERA
C/ Mayor Antigua, 70-3º izda.,Tfno.: 979 74 07 01 / 626 24 11 22
Correo electrónico: abadhelguera@gmail.com



martes, 26 de enero de 2016

HOY... UNA HISTORIA DE SUEÑO Y SUPERACIÓN

EL PUENTE DE BROOKLYN



En 1883, un creativo ingeniero de nombre John Roebling se inspiró en la idea de construir un espectacular puente que conectase Nueva York con Long Island. Sin embargo, los expertos en construcción de puentes de todo el mundo pensaron que aquello era imposible y le dijeron a Roebling que se olvidara de la idea. Simplemente no podía hacerse; no era práctico. Nunca se había hecho anteriormente. 
Roebling no pudo ignorar la visión que tenía en mente de este puente. Pensaba en ello todo el tiempo y sabía muy dentro de sí que se podía hacer. Sólo tenía que compartir su sueño con alguien más. Tras mucha discusión y persuasión logró convencer a su hijo, Washington, un ingeniero novato, que el puente podía, de hecho, construirse. 
Trabajando juntos por vez primera, padre e hijo desarrollaron conceptos de cómo podría lograrse y cómo vencer los obstáculos. Con gran entusiasmo e inspiración y la motivación de un desafío loco por delante, emplearon su cuadrilla y comenzaron a construir su puente de ensueño. 
El proyecto comenzó bien pero, cuando llevaba unos pocos meses de iniciado, un trágico accidente en el sitio cobró la vida de John Roebling.  Washington resultó herido y con una medida de daño cerebral, que le significó no poder caminar, hablar o aún moverse. "Se los dijimos". "Hombres locos y sus sueños locos". "Es tonto perseguir visiones alocadas". 
Todos tenían un comentario negativo que hacer y sentían que el proyecto debería ser archivado ya que los Roeblings eran los únicos que sabían cómo construir el puente. A pesar de su limitación, Washington nunca se desanimó y seguía teniendo un ardiente deseo de terminar el puente y su mente estaba tan despierta como siempre.
Intentó inspirar y transmitir su entusiasmo a algunos de sus amigos, pero estaban demasiado intimidados por la tarea. Mientras yacía en su cama de hospital, con los rayos del sol filtrándose por las ventanas, una suave brisa abrió las delgadas cortinas blancas y pudo ver el cielo y los topes de los árboles fuera por un momento. 
Parecía que hubiera un mensaje para él de no rendirse. De repente se le ocurrió una idea. Todo lo que podía hacer era mover un dedo y decidió hacer su mejor uso de eso. Haciéndolo, poco a poco desarrolló un código de comunicación con su esposa. Tocaba el brazo de su esposa con ese dedo, indicándole que quería que llamase a los ingenieros de nuevo. Entonces usó el mismo método de tocar su brazo para decir a los ingenieros qué hacer. Parecía tonto pero el proyecto estaba de nuevo en camino. 
Por 13 años Washington comunicó sus instrucciones con toquecitos de sus dedos al brazo de su esposa hasta que se terminó el puente. Hoy, el espectacular Puente de Brooklyn se yergue en toda su gloria como un tributo al triunfo del indomable espíritu de un hombre y su determinación de no ser derrotado por las circunstancias. Es también un tributo a los ingenieros y su trabajo de equipo, y a su fe en un hombre considerado loco por medio mundo. Se levanta como un monumento tangible al amor y devoción de su esposa que, por 13 largos años, pacientemente decodificó los mensajes de su esposo y les dijo a los ingenieros qué hacer. 
Tal vez este sea uno de los mejores ejemplos de una actitud que nunca se resigna al fracaso y que se sobrepone a las terribles limitaciones físicas para alcanzar una meta imposible. A menudo, cuando enfrentamos obstáculos en nuestra vida diaria, nuestras vallas se ven diminutas en comparación con las que otros han tenido que enfrentar. 

El Puente de Brooklyn nos muestra que los sueños que parecen imposibles pueden ser logrados con determinación y perseverancia, sin importar las probabilidades. Aún el sueño más distante puede ser alcanzado con determinación y persistencia.

lunes, 25 de enero de 2016

HOY...

PENSAMIENTOS


Según pienses y sientas en tu corazón, así serás y así te irá en la vida. Sabiduría tuya será elegir los pensamientos habituales que estarán en la base de tus decisiones y conductas. También debes ser prudente para que no se instalen en tu mente ideas negativas que erosionen tus aspiraciones profundas. 

Si piensas que estás vencido, vencido estás. Si piensas que no te atreves, no lo harás. Si piensas que te gustaría ganar, pero que no puedes, no lo lograrás. Porque en el mundo encontrarás que el éxito comienza con la voluntad del hombre. Todo será como tú pienses. Porque muchas carreras se han perdido antes de empezar. Y muchos cobardes han fracasado antes de haber empezado su trabajo. Piensa en grande y tus hechos crecerán. Piensa en pequeño y quedarás atrás. Tienes que estar seguro de ti mismo antes de intentar ganar un premio. La batalla en la vida no siempre la gana el más fuerte o el más ligero. Tarde o temprano el hombre que gana es aquel que cree poder hacerlo.


La tarea de tus meditaciones consiste en evaluar tus pensamientos habituales, para descartar toda negatividad: tristeza, ansiedad, rabia, odio, abatimiento; y por otra parte, cultivar las actitudes positivas: confianza, serenidad, fortaleza, paciencia, amor. Ánimo, decídete por la reflexión. 

domingo, 24 de enero de 2016

HOY...EL EVANGELIO

PROGRAMA


Hace poco más de un mes tuvimos elecciones y quizás dentro de poco las tengamos que volver a repetir, si no son capaces de pactar los diversos partidos políticos. En la campaña electoral cada uno presenta sus programas y hace una serie de promesas, esto también ocurre en otros aspectos de la vida. En el Evangelio de hoy podríamos decir que Jesús presenta su programa, es muy corto, ni siquiera es de él, está tomado de Isaías y tiene sólo cinco puntos: “1-Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, 2-para anunciar a los cautivos la libertad, 3-y a los ciegos, la vista, 4- para dar libertad a los oprimidos, 5-para anunciar el año de gracia del Señor”.
Interesante si además tenemos en cuenta sus únicas palabras originales, (debe ser el sermón más breve de la historia): “Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír”. Y se cumple en él, lo veremos a los largo de sus años de predicación, con los leprosos, los enfermos, los ciegos, los marginados…, no sólo lo anuncia sino que lo vive. Su vida será anunciar la Buena Noticia a los pobres. Si ser cristiano, como decía el catecismo: es ser discípulo de Cristo, debemos seguir su programa y saber bien en lo que tenemos que comprometernos, para que se vea en nosotros que somos testigos de Jesús.
La Iglesia, que como nos expone preciosamente San Pablo en la segunda lectura: “Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo”, debe ser hoy la que cumple esto. Nuestras comunidades y parroquias, con sus diversos dones y carismas, deben ser fieles a la Palabra de Dios tal como ha sido proclamada por Jesucristo y recogida por los testigos, como recuerda Lucas, al principio del texto: “Siguiendo las tradiciones trasmitidas por los que primero fueron testigos oculares y luego predicadores de la palabra. He resuelto Teófilo, escribírtelos por su orden, para que conozcas la solidad de las enseñanzas que has recibido”. Ese es el criterio que establece los límites, el alcance, el sentido y el objetivo de nuestro hacer.
Si bien es cierto que la liberación y el Año de la Misericordia tiene un matiz de interioridad, que afecta al corazón mismo de las personas, también es cierto que jamás puede excluir el acento social que implica la caridad política. La sociedad e incluso algunos en la Iglesia, soportan muy bien que hagamos obras de misericordia y caridad, más difícil les resulta entender que pidamos el cambio de las estructuras opresoras. El Año de Gracia era esto: se perdonaban todas las deudas, las posesiones de casas y tierra volvían a los primitivos dueños cada 50 años. Parece que no se cumplía, pero la proclamación por parte de Jesús, nos da las pistas para construir el Reino. El programa de Jesús nos espera.

“Porque el pueblo entero lloraba al escuchar las palabras de la Ley. Y añadieron: no estéis tristes, pues el gozo en el Señor es vuestra fortaleza” dice la primera lectura de Nehemías. La proclamación de la Ley y del programa de Jesús, entendido como norma de vida, no sólo no es motivo de tristeza, sino todo lo contrario, provoca la fiesta y la alegría entre los creyentes. Que en esta Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, el Señor, como rezamos en la plegaria eucarística, nos lleve a la unidad por la caridad. “Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados por un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo” nos recuerda la segunda lectura. Que cada uno asuma su responsabilidad en comunión con todos los hermanos, para que el bautismo común de todas las Iglesias cristianas, sea expresión viviente del programa de Jesús: el Reino de Dios.
PD: Este domingo también es el Día de la Infancia Misionera.

Julio César Rioja, cmf

sábado, 23 de enero de 2016

HOY...

GRACIAS


A pesar de la tristeza y la desesperación, a pesar de los tiempos en que supuse que nunca lo lograría, a pesar de los años en que la mente parecía una sala de torturas y el cuerpo una prisión, a pesar de los años de dolor y alejamiento de mi verdadera naturaleza, ha sido una vida llena de bendiciones, una vida de riquezas indecibles, y no pudo haber sido de otra manera.
Y si todo terminara mañana, si cayera el telón, todo quedaría resumido en una sola palabra, tan sólo quedaría una palabra, y esa palabra sería la misma que empezó todo esto, esa palabra es: Gratitud.
Gracias. Por todo, por la luz y la oscuridad, por las pérdidas y las ganancias, por el placer y el dolor, y por la inefable consciencia en donde todo surge y se desvanece como el canto de un pájaro.

* Jeff Foster

viernes, 22 de enero de 2016

HOY...

DICHOSOS POR SABER VIVIR



Nuestra vida muchas veces va perdiendo el brillo. Los acontecimientos, las circunstancias, más que ayudarnos a crecer, en vez de ser oportunidades de maduración para nuestra persona, nos limitan, nos hacen sufrir y por lo tanto los rechazamos.

Toma la vida con filosofía, aprende de ella y sácale el jugo, exprime de forma positiva todo lo que Dios permite y así serás una persona feliz y dichosa.

DICHOSOS los que saben reírse de sí mismos, porque no terminarán nunca de divertirse.

DICHOSOS los que saben distinguir una montaña de una piedra, porque se evitarán muchos inconvenientes.

DICHOSOS los que saben descansar y dormir sin buscarse excusas: llegarán a ser sabios.

DICHOSOS los que saben escuchar y callar: aprenderán cosas nuevas.

DICHOSOS los que son suficientemente inteligentes como para no tomarse en serio: serán apreciados por sus vecinos.

DICHOSOS los que están atentos a las exigencias de los demás, sin sentirse indispensables: serán fuente de alegría.

DICHOSOS ustedes cuando sepan mirar seriamente a las cosas pequeñas y tranquilamente a las cosas importantes: llegarán lejos en esta vida.

DICHOSOS ustedes cuando sepan apreciar una sonrisa y olvidar un desaire: vuestro camino estará lleno de sol.

DICHOSOS ustedes cuando sepan interpretar con benevolencia las actitudes de los demás, aún contra las apariencias: serán tomados por ingenuos, pero es el precio justo de la caridad.

DICHOSOS los que piensan antes de actuar y rezan antes de pensar: evitarán muchas tonterías.

DICHOSOS ustedes sobre todo cuando sepan reconocer al Señor en todo los que se encuentran: habrán logrado la verdadera luz y sabiduría.

Con estos consejos, Santo Tomás Moro nos da algunas pautas de cómo vivir nuestro breve paso por esta tierra llevando un mensaje, unas actitudes y un modo de ser algo diferente de lo que hoy nuestra sociedad contemporánea nos ofrece.


Marca tú la diferencia, y enséñanos con tu ejemplo a vivir...

* P. Dennis Doren L.C.

jueves, 21 de enero de 2016

HOY...

VOLVER A MISA


Este artículo es para ti si has estado pensando en volver a Misa. Tal vez ha pasado poco tiempo desde la última vez que fuiste, o tal vez ha pasado mucho. Si el volver a Misa ha estado en tu mente, si has sentido un pequeño tirón en tu corazón que quiere volver, pero estás preocupado, ansioso o simplemente un poco inseguro sobre hacerlo, esto es para ti.

Piensas que cuando entres a la iglesia habrá un parpadeo de luz por encima de tu cabeza diciendo: “¡Oye este chico no ha venido a Misa en años!” No tengas miedo, Dios te quiere cómo estás ahora. Para volver a participar de la Misa, no tienes que ser perfecto. Dios quiere que todos nos acerquemos a lo mejor que Él ha preparado para nosotros que es la Eucaristía, pero eso no significa que tengas que pasar por un detector de metales de tus pecados antes de entrar. Vuelve como eres y Dios hará su parte.

Si quieres regresar, acá te dejamos algunos consejos:

1. Encuentra a alguien con quien puedas ir
Es difícil ir a un sitio nuevo solo y no es diferente si vas a volver a Misa después de algún tiempo. Si quieres ir, pero no te queda otra que ir solo, mira si puedes contactarte con alguien que pueda ir contigo. Puede ser un amigo que ya va regularmente a una parroquia, o simplemente un conocido. Tal vez un miembro de la familia que previamente te ha pedido que vayas con él.

2. Recuerda a dónde vas. Prepárate con antelación
Como en cualquier ocasión especial, la preparación es importante. Ponerte tu mejor ropa tiene un impacto en cómo te sientes y te comportas cuando estás allí. Vestirnos para la ocasión nos ayuda a enfocarnos. En segundo lugar, ayuda mucho buscar la lectura del Evangelio un día antes, leerlo y meditarlo un poco (en vez de ir a ciegas). Si vas a ir en familia, trata de leer el comentario junto con ellos. Puedes encontrar las lecturas diarias y leer una reflexión del Evangelio para ayudarte a entender el significado de la Palabra de Dios y cómo ésta puede impactar en tu vida.

3. Trata de llegar un tiempito antes
Trata de llegar con tiempo para que no tengas una carrera estresante de última hora. Si tu iglesia tiene, toma un cancionero o un folleto de la misa para que puedas seguir sus partes. Usamos este pequeño tiempo antes, para hacer silencio, orar y pedir al Espíritu Santo que nos permita participar en la Misa de la mejor manera.

4. Participa sin miedo
La Misa no es una forma de entretenimiento, pero tampoco estamos para ser observadores estáticos del evento. Canta con todo tu corazón (no importa si crees que cantas mal, no es una competencia), sé un participante activo. No te preocupe si cometes errores y si no estás seguro de cuando sentarte, pararte o arrodillarte; solo tienes que seguir a las personas que te rodean. Si estás confundido en cuanto al por qué de pie o de rodillas, recuerda que esto ayuda a centrarnos en la importancia de lo que está sucediendo en ese momento. Lo principal es darle todo lo que puedas a la Misa, trayendo todo lo bueno y lo malo de tu vida y poniéndolo ante El Padre celestial que te ama.

5. No te preocupes por tus hijos
Tal vez vuelves a Misa con tus hijos. Si es así, por favor no te preocupes si tu bebé está llorando. Habrá muchas personas que son padres y recuerdan lo que es llevar un bebé a la Misa. Muchas parroquias tienen un lugar especial en la parte posterior, donde puedes llevar al bebé si quieres y todavía puedes seguir la Misa desde allí. Para niños mayores es bueno traerles algo (como un libro de oraciones o historias de la Biblia) de esta forma, ellos podrán participar también.

6. Entiende la importancia de la comunión
Antes de ir a recibir la comunión, invita a Jesús a tu corazón y trata de estar muy presente en el momento. Después de comulgar es bueno que te detengas un tiempo en la banca hablando con Jesús y agradeciéndole por todo lo que te ha dado. ¡Cristo es un regalo hermoso, si estás preparado! Recuerda que solo debes recibir la comunión si estás en un estado de gracia. Volver a la misa es mucho más que un ritual, es un encuentro auténtico con Cristo y queremos hacerlo con un corazón limpio. Si no puedes recibir la Eucaristía, o si no fueras capaz de confesarte, por favor no dejes de participar en la Misa por esto, poco a poco comenzarás a estar preparado. Por cierto, todos (especialmente los que asistimos a Misa regularmente) tenemos que recordar la necesidad de no tomar al Señor y a nuestra salvación por sentado. No te preocupes por lo que otros piensen. Es entre tú y Dios. Nadie debe juzgar a la gente de la cola de la comunión o de las bancas. No es un tiempo para mirar y pensar por qué unos recibieron o no recibieron la comunión, es un tiempo para mirar nuestro propio corazón, y con confianza y alegría pedir al Señor que nos sane.

7. Quédate un ratito al finalizar la misa
Luego de terminada la misa, no te apures en salir de la iglesia. Tómate algunos momentos para reflexionar sobre lo que acaba de suceder. ¿Hubo algo que te impactó? ¿Cómo esto puede cambiar tu vida? ¿Qué que necesitas hacer para cambiar?

8. Y finalmente… ¡No esperes la perfección!

A veces cuando vamos a misa no es como nosotros desearíamos. En un mundo ideal, la celebración de la Misa estaría llena de vida y alegría, el sacerdote daría una homilía preciosa y todo el mundo podría sentirse completamente uno con Dios. Pero muchas veces la misa puede ser diferente, nos puede parecer aburrida y monótona. Independientemente de tu experiencia, recuerda que Cristo está verdaderamente presente y Él no está limitado por nuestras imperfecciones humanas. Aunque la Misa te parezca aburrida, Cristo está todavía allí, se presenta incluso si las personas no están realmente presentes. Concéntrate en darlo todo, buscar una conexión con Dios y con los que te rodean, y recuerda que la Misa es un acto de fe. No te preocupes si no sientes nada, pero por favor, estate seguro de que Cristo está encantado de verte de nuevo!!!

miércoles, 20 de enero de 2016

HOY... UN TESTIMONIO

Nguyen Van Thuan




El Cardenal Nguyen Van Thuan (1928-2002), pasó trece años en una cárcel comunista. Se ingenió para escribir a los cristianos, como san Pablo encarcelado en Roma. Dotado de una excelente memoria, citaba fielmente la Biblia y documentos del Vaticano II. Escribió así “El camino de la esperanza”. Aquí tienes una selección de sus escritos sobre formación humana.

- El hábito de la crítica es uno de los obstáculos más grandes del crecimiento espiritual. El hablar mal de los otros no hace más que irritarlos y cultivar amargura en tu corazón.
- Chocar con los demás forma parte de la vida normal. Una vida social que no presentara conflictos sería semejante a la del paraíso. Con el roce una piedra se puede volver más lisa, más redonda, más pulida y más hermosa.
- No te dejes contaminar por la superficialidad. Esta enfermedad causa la muerte gradual de la voluntad. Sus síntomas son un continuo cambio de opiniones y de actividades. Que tu vida no se vuelva un cementerio de proyectos no realizados.

En el año 2000 predicó un Retiro al Papa y a los Cardenales que escucharon con asombro testimonios de su vida de prisionero. Les contó cómo rezaba en secreto la Misa. Lo hacía en la oscuridad, la sabía de memoria, mezclando en la palma de la mano tres gotitas de vino y una de agua. Y fortalecido por este sacramento, sobrellevó con valor la injusta privación de su libertad. 

martes, 19 de enero de 2016

ESPÍRITU SANTO



“Queridos, padres, padrinos y madrinas, si quieren que sus hijos sean verdaderos cristianos, ayúdenles a crecer 'inmersos' en el Espíritu Santo, es decir, en el calor del amor de Dios, en la luz de su Palabra. Por ello, no olviden invocar a menudo al Espíritu Santo, todos los días… Ayuden a estos niños a crecer bien, si se les da la Palabra de Dios, el Evangelio de Jesús… hay que darlo con el ejemplo… Aquello que hace la leche para el cuerpo, la Palabra de Dios lo hace para el Espíritu: la Palabra de Dios hace crecer la fe… por la fe hemos sido creados por Dios”

Papa Francisco

lunes, 18 de enero de 2016

HOY...

HORA DE LEVANTARSE


Año tras año, siglo tras siglo, hombres y mujeres caminan. Unos nacen, otros mueren. La vida tiene un ritmo que no puede detenerse. 
Se suceden momentos de alegría y otros de tristeza. Pero solo tienen sentido aquellos momentos y acciones en los que se acoge el amor y se ama. 
Si comprendemos esto, llegamos a captar el misterio de la existencia humana. No parece fácil, porque frecuentemente nos ahogan asuntos inmediatos, voces que aturden, cansancios asfixiantes y tentaciones de dentro o de fuera. 
Una mirada al horizonte puede desvelar el misterio de la meta. Más allá de la muerte Dios nos espera. Más acá, estamos en el tiempo de la misericordia. 
Ese fue el sentido de la Encarnación del Hijo. Vino para hacer la Voluntad del Padre, que coincidía con la salvación de los hombres. 
La voz de Cristo provocó un terremoto espiritual en tierras de Palestina durante pocos años del primer siglo de nuestra era. Esa voz sigue viva también hoy, resuena en millones de corazones.
¿Escuchamos lo que dice el Maestro? ¿Abrimos el corazón al don de misericordia que brota de la Cruz en el Calvario? ¿Comprendemos el milagro de la victoria definitiva sobre la muerte que se produjo la mañana de la Pascua? 
Los hechos se suceden. Noticias que alegran o que inquietan. Preocupaciones por la familia, por los amigos, por la salud, por el trabajo. Leyes y gobiernos que van contra los principios básicos de la justicia y del respeto a la vida. 
La voz de Jesús el Nazareno atraviesa los siglos y llega hasta nuestro tiempo. Esa voz, acogida gracias a la fe, cambia corazones y enciende esperanzas. Trae misericordia y sostiene a los que trabajan por la paz, la justicia y la verdad. 
El cielo está más cerca de lo que imaginamos. En cada misa asistimos nuevamente al culmen de la Redención, nos unimos a quien reina, triunfante, en los cielos. 
"Porque es ya hora de levantaros del sueño; que la salvación está más cerca de nosotros que cuando abrazamos la fe. La noche está avanzada. El día se avecina. Despojémonos, pues, de las obras de las tinieblas y revistámonos de las armas de la luz..." (Rm 13,11 12).


* Autor: P. Fernando Pascual LC | Fuente: Catholic.net

domingo, 17 de enero de 2016

HOY... EL EVANGELIO

VAMOS DE BODA


Vamos de boda y hay demasiada agua y poco vino. Boda…, vino…, todo en San Juan son símbolos, hasta a los milagros los llama signos. Desde el profeta Oseas, hasta el texto de la primera lectura de hoy: “Como un joven se casa con su novia, así te desposa el que te construyo; la alegría que encuentra el marido con su esposa, la encontrará tu Dios contigo”, la relación de Dios con su pueblo se presenta en clave matrimonial. Lo mismos pasa con el vino, que es el signo mesiánico por excelencia, como nos recuerdan los Salmos: “Y vino que alegra el corazón” (104,15). Una boda sin vino es como una vida sin alegría.

No necesitamos mucha imaginación, para conectar la boda de Caná, con Jesús, que viene a desposarse con su novia, la humanidad, el pueblo de Dios, que busca el Reino, montones de veces representado por una comida. Banquete, que es eucaristía, en la que se toma el vino de la sangre derramada y en el que están presentes: la comunidad, los discípulos y María. La boda es fiesta, cosa que no siempre tenemos presente los cristianos, que a veces miramos un poco de reojo, lo que es diversión, placer y alegría. Todos están invitados, pero a la hora de brindar: “Faltó el vino”.

Es María la que se da cuenta y se adelanta a buscar una solución: “La madre de Jesús le dijo: No les queda vino. Jesús le contestó: Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora”. La respuesta de Jesús podemos interpretarla de diversas maneras, no la llama madre sino “mujer” y continúa con un: “Déjame, todavía no ha llegado mi hora”, que no es muy alentador. Pero eso no desanima a María que aconseja a los sirvientes ponerse a disposición de Jesús: “Haced lo que él diga”. Es la creyente que es capaz de percibir las cosas y las situaciones, más allá de lo inmediato y sobre todo es la que lleva a Jesús.

El agua debe ser convertida en vino, no se puede aguar la fiesta. Los sirvientes llenan hasta arriba de agua seis tinajas de cien litros, los invitados deben ser numerosos y aquellos novios están a punto de hacer el ridículo. La gente siguió bebiendo y disfrutando, sin darse cuenta del signo. El mayordomo se percata al probarlo, de que este vino del final es bueno y se lo comenta al novio, en caso de apuro igual se le hubiera ocurrido echar agua al vino. Seguimos con el simbolismo, es preciso ponerse al servicio de Jesús, el cuenta con nosotros para hacer sus signos, no debemos aguar la vida, ni aguar el Evangelio. El amor de Dios quiere nuestro bien y el de este matrimonio, pero no olvidemos que necesita de nuestra acción, de nuestra vida, de nuestra disponibilidad: “Y las llenaron hasta arriba”.

Intencionadamente el relato termina con estas palabras: “Así, en Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria, y creció la fe de sus discípulos en él”. Jesús da la primera señal del amor de Dios, un amor tierno y delicado como el de los novios, (que nos recuerda también la primera lectura: “Te llamarán Mi favorita, Desposada…), que sabe estar en los momentos delicados, que es sensible a cuanto afecta a nuestra vida y a nuestra felicidad. Este primer signo viene a decirnos que Jesús establece un nuevo estado de vida: un matrimonio en que el novio y la novia, Dios y su pueblo, se unen en la felicidad que da el amor.

Hasta el final, nuestra tarea será intentar seguir cambiando el agua en vino, hacer de la vida una fiesta, que al fin y al cabo es el gran objetivo del Evangelio. El cristianismo no es depresión, negativismo, ni pesimismo, hemos sido llamados a crear una comunidad que sea una auténtica fiesta: una fiesta en la que nadie se sienta marginado, aislado u olvidado. Se nos convoca a participar de un banquete de bodas en el que el vino será dado en abundancia. Vivir la Eucaristía, es poner alegría donde hay tristeza, amor donde hay odio, unidad donde hay división. Este es el signo de la presencia de Jesús en nuestra vida. ¡Venid a la boda!, que no nos falte la alegría en la vida y el entusiasmo en la Iglesia.
Julio César Rioja, cmf

sábado, 16 de enero de 2016

HOY...

VENID DE TODOS LOS PUEBLOS



Venid de todos los pueblos, de todas las culturas,
de todas las religiones,
de todos los credos y creencias,
los agnósticos y los ateos también.

Siempre estará la puerta de mi casa abierta,
habrá un hueco para vosotros en mi corazón,
una estancia confortable
para los peregrinos, los desfallecidos,
los agobiados por los avatares de la vida.

Entremos en la Presencia
que a todos nos invade y vincula,
contemplemos la Realidad
que nos sostiene, que es el origen,
el fundamento y el trasfondo
de todo lo que existe:
las altas cumbres de la tierra,
el océano inmenso,
las plantas, los animales,
el hombre y la mujer,
las estrellas y las nebulosas,
el universo entero.

Ojalá escuchemos el eco de fondo
que nos sigue llegando
hoy mismo hasta los oídos del espíritu:
“No permitáis que se os endurezca el corazón,
contemplad todas mis obras,
convertíos en cuidado
hacia todos los seres vivientes,
y, sobre todo, no os olvidéis
de quienes peor lo pasan”.

Pero, aunque os mantengáis obstinados,
al margen de mis desvelos, aunque no reconozcáis
mi ternura hacia cada uno de vosotros,
sabed que mi misericordia
es superior a todo lo que podáis imaginar,
que mi justicia no es vuestra justicia,
que os espero siempre a todos,
para que viváis y entréis en mi descanso.


Miguel Ángel Mesa Bouzas.

viernes, 15 de enero de 2016

HOY...UN EJEMPLO

MADRE ANGÉLICA


La Madre Angélica (nacida el 20 de abril de 1923 en Canton, Ohio) es una religiosa norteamericana que actualmente tiene 92 años de edad. Cuando era joven religiosa, tuvo un grave accidente, que la dejó casi tullida para toda la vida, perdiendo una vértebra. Ahora camina con dificultad con hierros en las piernas. Pero ella no se amilanó y pudo superar sus limitaciones con una fe inmensa en Jesús y en su presencia real en el Santísimo Sacramento. Actualmente, tiene seis doctorados y muchos premios nacionales e internacionales. Fundó el convento donde reside con la finalidad de adoración perpetua al Santísimo Sacramento, en Birmingham, Alabama (USA). Con su fe y oración, y la de sus religiosas, ha conseguido lo que hubiera parecido humanamente imposible: una editorial católica con su imprenta, la mayor emisora de radio privada de onda corta, un Instituto misionero y un canal de televisión católico por cable, que emite vía satélite las 24 horas en distintas lenguas y llega a 170 países (EWTN).
Para ella, todo es un milagro de Dios por su confianza total. Ella habla de que “fue cuestión de lanzarse al vacío, confiando solamente en Dios. Fue cosa de fiarse de Dios y dejarse llevar. Y todo llegó poco a poco... A mí todo el mundo me decía que mi proyecto de televisión era irrealizable, me hablaban de gastos, de equipos necesarios... Pero la obra se realizó. Por eso, debemos ser locos de amor por Jesús y tener la audacia de creer en Él. Él nos sigue diciendo como hace dos mil años: No tengas miedo, solamente confía en Mí”.

jueves, 14 de enero de 2016

HOY...

VALORES Y PRIORIDADES



La anécdota de hoy es una invitación a examinar si tienes una correcta jerarquía de los valores que orientan tu vida. Porque a veces puedes cometer el error de perder serenidad y alegría, fuerza y coraje de vivir por pérdidas que, si bien lamentables y dolorosas, no deben significar una catástrofe total. Como ves ésta es una reflexión de suma importancia.

Un hombre tiene un accidente con su coche y llega la policía al lugar del suceso. Allí se encontraron al accidentado en el suelo gritando entre sollozos por su coche que estaba destrozado. Los policías entonces le dicen: —Pero, ¡hombre! ¡Cómo se lamenta por su coche...! ¿No se da cuenta que ha perdido su brazo izquierdo? El hombre, con cara de terror, grita:
 —¡Cómo! ¡Que he perdido mi brazo izquierdo! ¡Dios mío, mi Rólex! ¿Dónde está mi Rólex?


El divino Maestro presentó este problema con una pregunta que nos lleva más allá de los límites terrenos: “¿De qué le vale al hombre ganar todo el mundo, si pierde su vida?”. La vida a la que se refiere Jesús es la vida que él vino a ofrecer en abundancia, la vida eterna que esperamos gozar en la visión del Sumo Bien. Don Bosco lo decía con sencillez: “Un rinconcito de Cielo lo arregla todo”. Que este pensamiento de fe te aliente en las penas. 

miércoles, 13 de enero de 2016

HOY... ATENCIÓN

VIVIR UNA VIDA LARGA


Un estudio determinó que hay malos hábitos que aumentan el riesgo de morir de una persona.  Estos hábitos están estrechamente vinculados al estilo de vida, y al mezclarse con otros pueden multiplicar los riesgos para la salud.  No es cuento: tomar trago en exceso, comer mal, fumar, ser físicamente inactivos, tener problemas de sueño y pasar horas sentados trabajando o viendo televisión son malos hábitos que enferman y que deben ser tenidos en cuenta a la hora de establecer la expectativa de vida de una persona. 

Esta es una de las conclusiones de un trabajo hecho por investigadores de la Universidad de Sidney, durante el cual analizaron datos sobre hábitos de 232 mil australianos, de 45 años o más, obtenidos durante seis años de seguimiento continuo y contenidos en el Global Burden of Disease.  Según los científicos, más de la mitad de las muertes del mundo pueden atribuirse, definitivamente, a esta clase de comportamientos de la gente o al ambiente en el que vive.  La combinación de varios de ellos exige, de acuerdo con la publicación, sacar banderas rojas a quienes los presenten y empezar a tomar medidas para ponerlos bajo control. 

1 Fumar sí que es mortal
Con más de 19 químicos carcinogénicos conocidos y un centenar de sustancias incompatibles con el organismo, el cigarrillo, o exponerse al humo de los demás, es responsable directo e indirecto de cerca de seis millones de muertes cada año. Entre los cánceres que causa están el de pulmón, boca, laringe y esófago, además del de vejiga, riñón, páncreas y cuello uterino.

2 Dieta poco saludable
La excesiva carga calórica, representada en carbohidratos, bebidas azucaradas, grasas saturadas y bajo consumo de verduras y frutas, son responsables del aumento del sobrepeso y la obesidad.  Este factor está ligado al incremento del síndrome metabólico, que desencadena alteraciones cardio-cerebro-vasculares, entre las que están los infartos y los derrames y trombosis cerebrales. 

3 Tener muy poca actividad física
Si bien el sedentarismo es la condición extrema de este factor, el mundo moderno ha llevado a que, poco a poco, las personas hagan poca actividad física, lo que repercute de manera directa en su organismo. 

4 Tomar en exceso
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen 3,3 millones de muertes por el consumo nocivo de alcohol; la evidencia disponible indica además que su uso excesivo es un factor causal de más de 200 enfermedades y trastornos.  Según la OMS, el 5,1 por ciento de la carga mundial de morbilidad y lesiones es atribuible a la ingesta de trago. 

5 Pasar horas sentado
El sedentarismo, de acuerdo con la OMS, está relacionado con el 6 por ciento de todas las muertes del planeta, al punto que este organismo lo ha calificado como el cuarto factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles.  Los investigadores llaman en especial la atención sobre el hábito de permanecer durante siete horas o más sentado o con muy poco movimiento.  

6 Dormir mal
La falta de sueño o dormir en exceso tiene serias implicaciones en el funcionamiento general del organismo.  El agotamiento físico, el bajo rendimiento, las alteraciones emocionales y el aumento del estrés con impacto sobre todos los sistemas del cuerpo son apenas algunas de las consecuencias