EL AMOR NO DEBE NACER EN LA ARENA DE LOS SENTIMIENTOS QUE VAN Y VIENEN, SINO EN LA ROCA DEL AMOR VERDADERO, EL AMOR QUE VIENE DE DIOS

(Papa Francisco)

viernes, 30 de junio de 2017

HOY... NOTICIAS

PADRES HELICÓPTERO

Últimamente se habla mucho de los padres helicóptero en las noticias. Son el tipo de padres que no pueden parar de "sobrevolar" a sus hijos. Prácticamente los envuelven en plástico de burbujas y acaban creando una generación de niños incapaces de manejar sus trabajos y sus vidas. Los padres helicóptero piensan que les están haciendo un favor a sus hijos, pero, en realidad, están mermando sus posibilidades de tener éxito. En concreto, están echando por tierra sus probabilidades de encontrar un puesto de trabajo y mantenerlo.
Últimamente se habla mucho de los padres helicóptero en las noticias. Son el tipo de padres que no pueden parar de "sobrevolar" a sus hijos. Prácticamente los envuelven en plástico de burbujas y acaban creando una generación de niños incapaces de manejar sus trabajos y sus vidas. Los padres helicóptero piensan que les están haciendo un favor a sus hijos, pero, en realidad, están mermando sus posibilidades de tener éxito. En concreto, están echando por tierra sus probabilidades de encontrar un puesto de trabajo y mantenerlo.
Los padres helicóptero protegen a sus hijos ante cualquier pequeño conflicto que pueda surgir con sus compañeros y amigos, por lo que, cuando crezcan, no sabrán solucionar las diferencias que afloren entre ellos y sus compañeros de trabajo o sus jefes.
Las personas aprendemos a resolver problemas a base de ensayo y error, analizando por qué algo no ha funcionado e intentándolo otra vez de otro modo. Este proceso de aprendizaje sirve para desarrollar la seguridad, las competencias y la autoestima. Los padres helicóptero impiden que sus hijos desarrollen estas virtudes, que son necesarias para el éxito profesional.
Los padres helicóptero creen que sus hijos deberían ganar en todo, que todo aquel que participa en una competición debería llevarse un trofeo y que los profesores deberían aprobarles todas las asignaturas, aunque sus trabajos y exámenes estén sin presentar o mal hechos. En el mundo real, solo hay un ganador en cada competición y solo se premia el trabajo bien realizado. Si los niños crecen pensando que hagan lo que hagan les van a dar un premio, nunca se darán cuenta de cuánto hay que esforzarse para conseguir las metas.
Estos niños consentidos se darán cuenta de que las competiciones no siempre se ganan cuando arruinen una entrevista de trabajo o sean despedidos, y acabarán desolados. No entenderán cuánto hay que esforzarse para alcanzar el éxito profesional. Les faltan competencias básicas y autonomía, carencias derivadas de no haber tenido que esforzarse para solucionar un problema o completar una tarea por sí solos. Están acostumbrados a que otras personas intercedan por ellos, como han hecho sus padres siempre. En resumen: son incapaces de pensar o actuar por su cuenta propia.
Los padres helicóptero, sin pretenderlo, inculcan un conjunto de actitudes negativas a sus hijos. Estos pequeños crecen con enormes expectativas de éxito sin relacionarlas con el tiempo o el esfuerzo que haría falta invertir y se sienten merecedores de un trato preferencial. Ninguno de estos dos comportamientos está bien visto entre los compañeros de trabajo y los jefes. En una entrevista de trabajo, cualquier posible empleador se sentirá desconcertado ante un joven que se cree con derecho a todo o que carece de determinadas competencias básicas. Si se suma el aura de ignorancia e incompetencia de esa persona con sus expectativas de grandes recompensas inmediatas sin importar el desempeño, lo más probable es que la entrevista acabe en un rechazo. Cuando los padres helicóptero deciden que es buena idea acompañar a sus hijos de veintitantos años a una entrevista de trabajo, están minando la seguridad que pueda tener el empleador en contratar al joven: "¿Por qué un adulto en busca de trabajo se traería a mamá y papá a la entrevista, si no fuera porque aún es más niño que adulto?", puede que se diga el empleador.
Pero hay muchas pequeñas acciones más por las que unos padres helicóptero pueden estar incapacitando a sus hijos. Por ejemplo, cuando se toman un café y dejan la taza o el poso sin limpiar y no hay consecuencias. Eso mismo, en el trabajo, solo consigue levantar la indignación de sus compañeros.
Los jóvenes consentidos esperan que "alguien" vaya detrás limpiando lo que ellos ensucian, al igual que pasaba cuando eran niños, pero no se dan cuenta de que ya no hay nadie tras ellos arreglando sus destrozos psicológicos, profesionales o personales. En un artículo de psicología, Barb Nefer expone que "los millennials se están viendo muy afectados por la depresión. Uno de cada cinco trabajadores millennials ha sufrido depresión laboral, en contraste con el 16% de la generación X y la generación del baby boom". Y el experto va más allá al declarar que, registran una mayor tasa de rendimiento deficiente en el trabajo y absentismo, así como una mayor cantidad de expedientes disciplinarios", factores que pueden impedir un buen desempeño laboral.
Según un artículo de 2013 de Brooke Donatone en The Washington Post, "la revista de investigación Journal of Child and Family Studies descubrió que los estudiantes universitarios que han tenido padres helicóptero presentan niveles más altos de depresión. [...] La crianza intrusiva interfiere en el desarrollo normal de la autonomía y las competencias de los hijos, lo que conduce a una mayor dependencia y a una menor capacidad para resolver tareas sin la supervisión de los padres".
Querer a tus hijos significa guiarlos, protegerlos y apoyarlos, pero sin atosigarlos, sobreprotegerlos o hacer tanto por ellos que no necesiten aprender a solucionar sus propios asuntos, afrontar los retos que lleguen o saber encajar las decepciones y los fracasos. El mayor acto de amor que les puedes ofrecer a tus hijos es dar un paso atrás y dejar que cometan errores, que les den vueltas a las cosas y aprendan por su cuenta. A veces, la mejor forma de "estar ahí" con tus hijos es no estar. Así es como les permites desarrollar la seguridad, las competencias, la autoestima y la inteligencia emocional.
Los jóvenes de hoy en día necesitan padres que les ayuden a convertirse en adultos, lo que implica dejar de estar tan encima, no envolverlos en plástico de burbujas y fomentar que hagan las cosas por su cuenta, que aprendan y descubran por su cuenta y que lidien con sus problemas, también por su cuenta.

Este post fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Canadá y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.

miércoles, 28 de junio de 2017

HOY... UN POEMA

EL REMORDIMIENTO


He cometido el peor de los pecados 
que un hombre puede cometer. No he sido 
feliz. Que los glaciares del olvido 
me arrastren y me pierdan, despiadados. 

Mis padres me engendraron para el juego 
arriesgado y hermoso de la vida, 
para la tierra, el agua, el aire, el fuego. 
Los defraudé. No fui feliz. Cumplida 
no fue su joven voluntad. Mi mente 
se aplicó a las simétricas porfías 
del arte, que entreteje naderías. 

Me legaron valor. No fui valiente. 
No me abandona. Siempre está a mi lado 
La sombra de haber sido un desdichado.

Jorge Luis Borges

martes, 27 de junio de 2017

CULTO DIVINO


El próximo 7 de julio se cumplen diez años del motu proprio Summorum Pontificum, con el cual Benedicto XVI, tras aclarar definitivamente que el rito de la misa anterior a la reforma de 1969, "nunca se ha abrogado" (art. 1), liberalizó su uso para toda la Iglesia latina, regulando su uso como "forma extraordinaria" del rito romano.

 El cardenal Robert Sarah, prefecto de la Sagrada Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, es un decidido impulsor de la aplicación de Summorum Pontificum. Y también de su interpretación (más allá de su aplicación específica a la misa tradicional) como criterio general orientador de un nuevo movimiento litúrgico que, tanto en la forma extraordinaria como en la ordinaria, se fundamente en la centralidad de Cristo en el sacrificio del Altar y en la sacralidad de la liturgia.
En el mensaje enviado a estos Encuentros, el cardenal Sarah dejó algunas ideas clave que destacamos:

1. "En las parroquias donde el Motu proprio ha sido puesto en marcha, los párrocos testimonian de un mayor fervor entre los fieles y los sacerdotes... Se ha observado también una repercusión y una evolución espiritual positiva en la manera de vivir las celebraciones eucarísticas según la forma ordinaria, sobre todo el redescubrimiento de actitudes de adoración hacia el Santísimo Sacramento: arrodillarse, genuflexión y, también, un mayor recogimiento caracterizado por ese silencio sagrado que debe marcar los momentos importantes del Santo Sacrificio de la misa para permitir a los sacerdotes y a los fieles interiorizar el misterio de la fe que se está celebrando".

2. "La liturgia debe reformarse siempre para ser más fiel a su esencia mística. Pero la mayor parte del tiempo esta 'reforma', que ha sustituido a la verdadera 'restauración' deseada por el Concilio Vaticano II, se ha realizado con un espíritu superficial y basándose en un único criterio: suprimir a toda costa una herencia que es percibida como totalmente negativa y superada, con el fin de abrir un abismo entre el antes y el después del Concilio".

3. "El cardenal Joseph Ratzinger ha repetido incansablemente que la crisis que sacude a la Iglesia, cincuenta años después, sobre todo después del Vaticano II, está vinculada a la crisis de la liturgia y, por consiguiente, a la falta de respeto, a la desacralización y la eliminación de los elementos esenciales del culto divino".

4. "No podemos cerrar los ojos ante el desastre, la devastación y el cisma que los promotores modernos de una liturgia viva han provocado al remodelar la liturgia de la Iglesia según sus propias ideas. Se han olvidado que el acto litúrgico es no sólo una oración, sino también y sobre todo un misterio en el que se realiza, para nosotros, algo que nosotros no podemos comprender plenamente, pero que debemos aceptar y recibir con fe, amor, obediencia y un silencio adorante. Es éste el verdadero significado de la participación activa de los fieles. No se trata sólo de una actividad únicamente externa, de un repartir papeles o funciones dentro de la liturgia, sino más bien de una receptividad intensamente activa: la recepción es, en Cristo y con Cristo, la ofrenda humilde de sí mismo en la oración silenciosa y con una actitud plenamente contemplativa".

5. "La grave crisis de fe, no sólo a nivel de los fieles cristianos, sino también y sobre todo de muchos sacerdotes y obispos, nos ha hecho incapaces de comprender la liturgia eucarística como un sacrificio, como el acto idéntico, llevado a cabo una vez por todas por Jesucristo, haciendo presente el Sacrificio de la Cruz de manera incruenta, en toda la Iglesia... A menudo tenemos la tendencia sacrílega a reducir la Santa Misa a una simple comida "comunitaria", a la celebración de una fiesta profana y a una autocelebración de la comunidad".

6. "La grave y profunda crisis que afecta a la liturgia y a la Iglesia desde el Concilio es debida al hecho de que su centro ya no es Dios y su adoración, sino los hombres y su pretendida capacidad de 'hacer' algo para estar ocupados durante las celebraciones eucarísticas".

7. "Se reprocha a la Europa política el haber abandonado o negado sus raíces cristianas. Pero la primera que ha abandonado sus raíces y su pasado cristiano es, sin duda alguna la Iglesia católica post-conciliar".

8. "No son de extrañar las devastaciones, las destrucciones y la guerra que vinieron a continuación y que persisten actualmente a nivel litúrgico, doctrinal y moral: la pretensión es que ninguna época como la nuestra ha sido capaz de comprender el 'ideal evangélico'. Muchos se niegan a mirar a la cara la obra de autodestrucción que la propia Iglesia está llevando a cabo mediante la demolición planificada de sus fundamentos doctrinales, litúrgicos, morales y pastorales".

9. "Lo más importante, ya sea que se celebre según la forma ordinaria o la extraordinaria, es proporcionar a los fieles lo que necesitan: la belleza de la liturgia, su sacralidad, el silencio, el recogimiento, la dimensión mística y la adoración. La liturgia tiene que ponernos cara a cara con Dios en una relación personal y de intensa intimidad. Debe favorecer que nos sumerjamos en la intimidad de la Santísima Trinidad".

10. "Sin esta dimensión mística del silencio y sin un espíritu contemplativo, la liturgia seguirá siendo ocasión de rupturas causadas por el odio, de enfrentamientos ideológicos y de humillaciones públicas de los débiles por parte de quienes pretenden tener la autoridad, en lugar de ser el lugar de nuestra unidad y de nuestra comunión en el Señor".

11. Me permito proponerles tres pistas que resumo en estas tres letras: SAF, es decir, Silencio-Adoración-Formación. Ante todo, el silencio sagrado, sin el cual no podemos encontrar a Dios.(...) Después, la adoración. (...) Por último, la formación litúrgica partiendo del anuncio de la fe o la catequesis, teniendo como referencia el Catecismo de la Iglesia Católica, lo que nos protege de posibles elucubraciones más o menos sabias de ciertos teólogos deseosos de 'novedades'".

12. "En este contexto global y en un espíritu de fe y de profunda comunión en obediencia a Cristo en la Cruz por lo que, humildemente, les pido aplicar con gran atención Summorum Pontificum; no como una medida negativa o retrógrada, que mira hacia el pasado, o como algo que construye muros y crea un gueto, sino como una contribución importante y verdadera para la vida litúrgica actual y futura de la Iglesia, así como para el movimiento litúrgico de nuestra época, por parte de un número cada vez mayor de personas, sobre todo jóvenes, que aportan tantas cosas verdaderas, buenas y hermosas".

lunes, 26 de junio de 2017

HOY... CONSEJOS

RELACIONES SANAS


Las relaciones de pareja sanas no siempre son fáciles ni están libres de conflictos.

Normalmente, las parejas más fuertes que llevan más tiempo saliendo están mejor preparadas para lidiar con los problemas de una forma madura y están comprometidas a crecer como personas y como pareja.

La edición estadounidense del HuffPost ha pedido a un grupo de expertos que expliquen lo que hacen las personas que mantienen relaciones sanas. Esto es lo que contaron:

1. Elogian a su pareja delante de otras personas.

"Quien mantiene una relación sana dice cosas buenas de su pareja a sus amigos, sus hijos, sus familiares y sus compañeros de trabajo. Es lo contrario de desprestigiar, una característica de las parejas menos funcionales. Decir que tu pareja es un manitas o que cocina las mejores cenas es una forma genial de mantener el lazo y la cercanía". —Samantha Rodman, psicóloga y coach de relaciones.


2. Sacan tiempo para pasarlo juntos.

"Las personas que tienen una relación sana sacan tiempo de su día a día para conectar. Conozco a parejas que conectan mientras pasean al perro, mientras hablan después de que los niños se vayan a dormir o mientras ven sus series favoritas". —Kurt Smith, psicólogo especializado en terapia para hombres.


3. Ríen sin tapujos y a menudo.

"Mi marido y yo nos reímos mucho. Nos reímos tanto que resulta difícil estar enfadados o disgustados mucho tiempo porque uno de los dos hará algo para animar las cosas. Cuando es necesario, se habla de las cosas serias, pero el sentido del humor supone una ayuda tremenda para mantener una relación sana. La gente que se ríe mucho no suele tomarse las cosas muy en serio y puede disfrutar más de una relación sana". —Marie Land, psicóloga.

4. Valoran las cualidades positivas de su pareja en vez de lamentarse por las negativas.

"Gracias a mi trabajo como consejero matrimonial, veo a muchas personas que acuden a consulta y que tienen muchas cosas de las que quejarse de su pareja. Lo curioso es que, en general, sus problemas son los mismos que los de todas las parejas. Las personas con una relación sana no se centran en las quejas. En vez de eso, ven las cosas buenas que hace su pareja y se esfuerzan por expresar su gratitud". —Aaron Anderson, consejero matrimonial y familiar.

5. Tienen empatía: se ponen en la piel de su pareja.

"Al tener empatía, las parejas son capaces de superar los malentendidos que suele haber en todas las relaciones. Estas habilidades de resolución de conflictos ayudan a que las personas que vienen a mi consulta se sientan escuchadas, comprendidas y valoradas cuando su pareja les diga: 'Puede que no esté de acuerdo contigo, pero te entiendo y entiendo que puedas sentirte así". —Kari Carroll, consejera matrimonial.

6. Siempre le dicen a su pareja a qué hora llegarán a casa.

"Un motivo muy común de discordia es que un miembro de la pareja sienta que está apartado o que no es una prioridad. Una sencilla llamada o un mensaje de texto para decir cuándo llegarás a casa después de salir ayuda a mejorar la relación y hace que tu pareja se sienta más segura". —Samantha Rodman.

7. Nunca dejan de coquetear.

"Coquetear es una manera única para que las parejas demuestren amor y emoción el uno por el otro y para que se diviertan haciéndolo. Cuando las parejas dejan de coquetear, la relación se vuelve aburrida. Las parejas con una relación sana siguen coqueteando entre sí... y a menudo". —Aaron Anderson.

8. Sus discusiones no están llenas de insultos.

"No hay insultos, ni etiquetas ni comentarios despectivos sobre su pareja, estén juntos o no. A menudo veo que las personas recurren al sarcasmo, dicen comentarios hirientes o humillantes a su pareja y luego se justifican diciendo algo como 'era una broma'. Las parejas que tienen una relación sana son cariñosas y se respetan". —Kurt Smith.

9. Se perdonan y pasan página en vez de guardar rencor.

"Un desacuerdo no acaba en un distanciamiento emocional. Los dos reconocen sus errores, piden perdón y pasan página. Pueden disfrutar de su vida juntos incluso si una hora antes no estaban de acuerdo en algo". —Marie Land.

Artículo publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' 

domingo, 25 de junio de 2017

HOY... EL EVANGELIO (Mt 10, 26-33)

CUESTIONARSE


Estamos en una época, en la que todo el mundo pregona sus verdades, sobre todo en las redes sociales. Pocos escuchan las razones de los otros y las tertulias televisivas o radiofónicas, se han convertido en enfrentamientos, no digamos el propio Parlamento, o simplemente cualquier esquina, o los bares. Es un momento también difícil para nuestra tarea de evangelizar, sin embargo, Jesús hoy nos dice: “Lo que os digo de noche, decidlo en pleno día, y lo que os digo al oído, pregonadlo desde la azotea”.

Nos repite varias veces: “No tengáis miedo”. En este ambiente de falta de diálogo y de encuentro, los cristianos tenemos un gran desafío, transmitir los valores del Reino. No podemos echar más leña al fuego y aunque nos critiquen y en ocasiones tengamos la sensación, de que muchos ridiculizan nuestra fe, según ellos “nuestro buenismo”, tendremos que seguir apostando por lo que nos transmitió el Maestro. El Evangelio del Reino, desde el principio provocó en muchos rechazo, sobre todo, de los que están contra la justicia, la fraternidad, la dignidad y los derechos de todas las personas. Hay gentes que no pueden entender, como celebramos el domingo pasado, que todos debemos estar sentados en la misma mesa, compartiendo el pan y la vida.

No se trata de ser héroes, se trata de aportar lo que creemos, no de acomodarlo, a las situaciones o a las personas con las que nos relacionemos. Si, ante el quedar mal o no ser bien mirados, claudicamos, está claro que hemos equivocado el centro de lo que creemos. Quizás, lo que más nos tiene que cuestionar, sea el ser mal mirados por los pequeños y necesitados, los débiles, los humildes, las nuevas generaciones, porque pueden hablarnos de que no estamos siendo fieles a nuestra misión evangélica y hemos abandonado el ser testigos.

No debemos confundir tampoco, el defender en la sociedad o a nivel político, sólo nuestros intereses legítimos como Iglesia (clases de religión, la cruz en la declaración de la renta…) y no quedar tan claro, que estamos de parte (de refugiados, inmigrantes, desahuciados, de los que tienen un trabajo precario…). Hay que apostar, por lo que apostó Jesús y con humildad, más allá de nuestros propios intereses, buscar como nos recuerda la Doctrina Social de la Iglesia y muchas instituciones eclesiales (Confer, Cáritas, Justicia y Paz, Manos Unidas…), el bien común.

La última frase del Evangelio de hoy, es seria: “Si uno se pone de mi parte ante los hombres, yo también me pondré de su parte ante mi Padre del cielo. Y sí uno me niega ante los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre del cielo”. ¿Qué es ponerse de parte de Jesús ante los hombres? Para nosotros, los que estamos aquí en la Eucaristía, que probablemente, no tenemos grandes altavoces ni espacios mediáticos desde los que crear opinión (los cristianos que los tienen deben asumir una gran responsabilidad). Tendremos que reflexionar, cuando estamos entre los vecinos, la familia, el bar, la plaza, y se habla de la economía, el trabajo, los extranjeros, los refugiados, la corrupción, la religión, la familia… y decir desde la Palabra de Dios, después de una sincera búsqueda, el porqué de nuestro cristianismo, sin miedos.
Tenemos un mensaje precioso y cuestionante, sin duda difícil, pero debe ser anunciado cueste lo que cueste: “Por eso, no tengamos miedo; no hay comparación entre nosotros y los gorriones”.

sábado, 24 de junio de 2017

viernes, 23 de junio de 2017

HOY... UN POEMA

MI ALMA TIENE PRISA

Conté mis años y descubrí, que tengo menos tiempo para vivir de aquí en adelante, que el que viví hasta ahora…

Me siento como aquel niño que ganó un paquete de dulces: los primeros los comió con agrado, pero, cuando percibió que quedaban pocos, comenzó a saborearlos profundamente.

Ya no tengo tiempo para reuniones interminables, donde se discuten estatutos, normas, procedimientos y reglamentos internos, sabiendo que no se va a lograr nada.

Ya no tengo tiempo para soportar a personas absurdas que, a pesar de su edad cronológica, no han crecido.

Ya no tengo tiempo para lidiar con mediocridades.

No quiero estar en reuniones donde desfilan egos inflados.

No tolero a manipuladores y oportunistas.

Me molestan los envidiosos, que tratan de desacreditar a los más capaces, para apropiarse de sus lugares, talentos y logros.

Las personas no discuten contenidos, apenas los títulos.
Mi tiempo es escaso como para discutir títulos.

Quiero la esencia, mi alma tiene prisa…

Sin muchos dulces en el paquete…

Quiero vivir al lado de gente humana, muy humana.
Que sepa reír, de sus errores.
Que no se envanezca, con sus triunfos.
Que no se considere electa, antes de hora.
Que no huya, de sus responsabilidades.
Que defienda, la dignidad humana.
Y que desee tan sólo andar del lado de la verdad y la honradez.

Lo esencial es lo que hace que la vida valga la pena.

Quiero rodearme de gente, que sepa tocar el corazón de las personas…
Gente a quien los golpes duros de la vida, le enseñó a crecer con toques suaves en el alma.

Sí… tengo prisa… por vivir con la intensidad que sólo la madurez puede dar.

Pretendo no desperdiciar parte alguna de los dulces que me quedan…
Estoy seguro que serán más exquisitos que los que hasta ahora he comido.

Mi meta es llegar al final satisfecho y en paz con mis seres queridos y con mi conciencia.
Tenemos dos vidas y la segunda comienza cuando te das cuenta que sólo tienes una.

Poema Golosinas
Mario de Andrade

jueves, 22 de junio de 2017

HOY...

EL NOBLE Y EL GRANJERO


Su nombre era Fleming, y era un granjero escocés pobre. Un día, mientras intentaba ganarse la vida para su familia, oyó un lamento pidiendo ayuda que provenía de un pantano cercano. Dejó caer sus herramientas y corrió al pantano. Allí, entró hasta la cintura en el estiércol húmedo negro. Se trataba de un muchacho aterrado, gritando y esforzándose por liberarse. El granjero Fleming salvó al muchacho de lo que podría ser una lenta y espantosa muerte. Al día siguiente, llegó un carruaje elegante a la granja. Un noble elegantemente vestido salió y se le presentó como el padre del muchacho que el granjero Fleming había ayudado.

-"Yo quiero recompensarle", dijo el noble. "Usted salvó la vida de mi hijo."

-"No, yo no puedo aceptar un pago por lo que hice," contestó el granjero escocés . En ese momento, el hijo del granjero vino a la puerta de la familia de la cabaña. "¿Es su hijo?" el noble preguntó.

-"Sí," el granjero contestó orgullosamente.

- "Le propongo un trato. Permítame proporcionarle a su hijo el mismo nivel de educación que mi hijo disfrutará. Si el muchacho se parece a su padre, no dudo que crecerá hasta convertirse en el hombre del que nosotros dos estaremos orgullosos".

Y el granjero aceptó. El hijo del granjero Fleming asistió a las mejores escuelas y con el tiempo, se graduó en la Escuela Médica del St. Mary's Hospital en Londres, y siguió hasta darse a conocer en el mundo como el renombrado Dr. Alexander Fleming, el descubridor de la Penicilina.
Años después, el hijo del mismo noble que fue salvado del pantano estaba enfermo de pulmonía. ¿Qué salvó su vida esta vez? La penicilina.
¿El nombre del noble? Sir Randolph Churchill.
¿El nombre de su hijo? Sir Winston Churchill.
Alguien dijo una vez: Lo que va, regresa.
Trabaja como si no necesitaras el dinero.
Ama como si nunca hubieses sido herido.
Baila como si nadie estuviera mirando.
Canta como si nadie escuchara.
Vive como si fuera el Cielo en la Tierra.
Nada pasará si no lo haces. Pero si lo haces, alguien sonreirá gracias a ti.
Haz el bien y no mires a quién.

miércoles, 21 de junio de 2017

martes, 20 de junio de 2017

HOY...

ORACIÓN PARA UN HOGAR FELIZ

Señor, Jesús, Tú viviste en una familia feliz.
Haz de esta casa una morada de tu presencia,
un hogar cálido y dichoso.

Venga la tranquilidad a todos sus miembros,
la serenidad a nuestros nervios.
el control a nuestra lenguas,
la salud a nuestros cuerpos.

Que los hijos sean y se sientan amados
y se alejen de ella para siempre
la ingratitud y el egoísmo.

Inunda, Señor, el corazón de los padres
de paciencia y comprensión,
y de una generosidad sin límites.

Extiende, Señor Dios, un toldo de amor
para cobijar y refrescar, calentar y madurar
a todos los hijos de la casa.

Danos el pan de cada día,
y aleja de nuestra casa
el afán de exhibir, brillar y aparecer,
líbranos de las vanidades mundanas
y de las ambiciones que inquietan y roban la paz.

Que la alegría brille en los ojos,
la confianza abra todas las puertas,
la dicha resplandezca como un sol;
sea la paz la reina de este hogar
y la unidad su sólido entramado.

Te lo pedimos a Ti que fuiste un hijo feliz 
en el hogar de Nazaret junto a María y José. Amén.

lunes, 19 de junio de 2017

HOY... UNA POESÍA

AL SANTÍSIMO SACRAMENTO


Divino pan que das eterna vida

a aquel que dignamente

dispuesto, como debe, te recibe;

dulcísima comida

para la pobre gente

que en la miseria de este mundo vive.

¡Dichoso el que a comerte se apercibe!

Otro cualquier manjar el cuerpo ofende,

mas este pan divino

la vida de las almas perfecciona,

el morir no defiende

que da el fatal destino:

mas después asegura la corona

que el Apóstol predica y Cristo abona.

Suerte dichosa y bienaventurada

que por modo no visto,

ni de ángel ni de hombre imaginado,

quede el alma endiosada

y viva en ella Cristo,

que da el ser y vida a lo criado,

dándosela a comer en un bocado.

Cristo de nuestras almas se apacienta

en tan alto convite,

y nosotros a Cristo apacentamos,

y el alma se sustenta

dél, sin que se le quite

nada, por muchas veces que comamos,

porque es Dios infinito el que gustamos.

Miguel de Cervantes Saavedra



domingo, 18 de junio de 2017

HOY... EL EVANGELIO (Jn 6, 51-58)

CULTURA DEL ENCUENTRO


Alguno puede preguntarse si la fiesta de hoy, no es una repetición del día de Jueves Santo, (en ella también celebramos el Día de Amor Fraterno y de la Caridad), o de lo que actualizamos cada domingo y cada día en la Eucaristía. Hay que remontarse a la tradición, para conocer el verdadero sentido de esta fiesta, que está sobre todo, centrada en la adoración al Santísimo y su vivencia en la religiosidad popular.

Hoy salimos a la calle en procesión, esperemos que no con la pretensión, de enseñar nuestras Custodias, palios, peinetas… lo cual nos convertiría, en una muestra de arqueología. Salimos, porque Él está siempre en salida y aunque a nosotros nos cueste, quiere poner su mesa en las casas, en las calles, en las plazas, en las esquinas. Derramó su sangre por todos o por muchos, no entremos en discusiones litúrgicas, y nos recuerda que nosotros, debemos poner también nuestra vida al servicio del pueblo.

Al celebrar la Eucaristía, reconocemos que nuestra vida, nuestros bienes, nuestro trabajo, son un bien de toda la comunidad, renunciamos como Jesús, a la pertenencia exclusiva. Por eso, para celebrar esta fiesta se necesita valentía, sólo desde la audacia, se puede creer en el desafío que nos recuerda, que nuestra vida no es una propiedad privada, sino algo que está al servicio del bien común. Nos lo deja claro el lema de Cáritas, en este Día de la Caridad: “Llamados a ser comunidad”. Antes, nos lo ha dicho en la segunda lectura San Pablo en su carta a los Corintios: “El cáliz de nuestra Acción de Gracias, ¿no nos une a todos en la sangre de Cristo? Y el pan que partimos, ¿no nos une a todos en el cuerpo de Cristo? El pan es uno, y así nosotros, aunque somos muchos, formamos un solo cuerpo, porque comemos todos del mismo pan”.

Se trata de vivir en este día la “cultura del encuentro”, éste es el sentido de nuestra presencia en las calles, la Campaña de Cáritas, recoge unas palabras del papa Francisco que nos lo explicita: “La acogida y la apertura a los demás, lejos del miedo que sólo nos lleva a ver riesgos y peligros, son una oportunidad para descubrir el rostro de Dios en cada hermano y hermana, para celebrar en comunión los dones y riquezas que nos regala a cada uno para poner al servicio de la construcción del bien común que es de todos”. Al comer juntos el pan, les decimos a los hermanos: esta es mi vida entregada por vosotros (repasemos el Evangelio de hoy). Comulgar es darse a los demás y recibir a los demás, saber aceptar al “extraño” en nuestro grupo, nuestra mesa, nuestros círculos, nuestro pueblo, nuestro barrio… y eso es el encuentro, del que se nos habla desde Cáritas.

Cada vez que celebramos esto en memoria suya, nos introducimos en la historia de liberación que comenzó Dios, sacando a su pueblo de la esclavitud y alimentándole con el maná, como nos recuerda la primera lectura del Deuteronomio. La Eucaristía nos conduce hacia la tierra prometida, para aprender a vivir en común en la misma casa, en la Tierra común que nos acoge a todos. Todas las personas de un lugar u otro, tenemos los mismos derechos. Por eso, esta fiesta es un símbolo de lo que es el Reino, todos comemos el mismo pan y no puede ser que mientras unos comen hasta hartarse, otros pasen necesidad.

Lo que estamos haciendo este domingo, es para hombres y mujeres recios, no es algo ritual o vacío, es poner en juego la vida, es donarse y aceptar la vida de los otros, es dejarse habitar por Jesús y habitar en Él. Es compartir la mesa del trabajo diario, con toda la humanidad que sufre, no separar esta mesa del altar, de las mesas de la vida. Será quizás por eso, por lo que nos cuesta tanto celebrar la Eucaristía y salir a la calle, acompañando en procesión a todos los que buscan su liberación. Es mejor domesticar lo que nació como alternativo, subversivo y revolucionario, aunque a unos cuantos les fuera la vida en ello.

sábado, 17 de junio de 2017

HOY... SOLIDARIDAD

VIVIR ETERNAMENTE

La familia de Ignacio Echeverría destinará la indemnización para construir una iglesia en África
El cardenal Osoro presidió el funeral por Ignacio Echeverría

Ignacio Echeverría seguirá haciendo el bien aunque no ya no esté físicamente aquí. El conocido como “héroe del monopatín”, que murió apuñalado tras enfrentarse a los terroristas del puente de Londrés, era un devoto católico y una persona comprometida con los más vulnerables.

Por ello, la familia quiere continuar la obra de Ignacio. Aunque en un principio los familiares de Echeverría querían declinar la indemnización tanto del gobierno británico como del seguro del HSBC, banco para el que trabajaba, finalmente ha decidido aceptarla para realizar proyectos benéficos en nombre de este héroe español.

Según ha podido saber Actuall, la familia quiere llevar a cabo dos proyectos que muestren las dos pasiones de este joven: el monopatín y la fe. Para ello, con estos fondos crearán una escuela de patinaje en Palestina, destinada especialmente a los niños más pobres.

Por otro lado, la familia quiere que con el dinero que les dará el banco en el que trabaja Ignacio se construya una iglesia en algún país de África donde tengan presencia los misioneros combonianos.
Artículo de Religión en Libertad

viernes, 16 de junio de 2017

HOY... ANIMAMOS

CONVIVENCIA VILLAGARCÍA


El próximo sábado se celebrará el fin de curso 2016-2017 de los Equipos de Nuestra Señora en la Región Noroeste. A la vez, se procederá al cambio de Responsables después de cuatro años intensos y emotivos. Herminio y Mari Nieves nos cederán el testigo a nosotros y la foto cambiará de protagonistas. Por tanto, hay razones poderosas para pasar una gran velada compartida con equipistas de toda la Región. Una gran ocasión para vernos, compartir, descansar y hacer Movimiento.

¡¡¡ OS ESPERAMOS!!! 


CyJ

miércoles, 14 de junio de 2017

HOY... DEPORTE

EL PARTIDO DE TU VIDA



Estos son los 5 goles que has de marcar:
1º. Luchando contra la instalación, el apego, la autosuficiencia, la insolidaridad y la solitaridad. «Un corazón solitario no es un corazón» (A. Machado). Un cristiano solitario es una equivocación, una profanación.
2º. Apertura de puertas y ventanas.
Atención al hermano y al cercano. Un esfuerzo por comprenderlo y conocerlo mejor. Empezamos por los ambientes de familia, trabajo, comunidades, grupos y movimientos.
3º Bajar a la calle.
Atención a los de fuera, que incluso puedan entrar en tu casa. Atención especial al pobre, al marginado, al extraño. Más acogida y compresión.
 El cambio del corazón.
No basta con conocer y comprender, hay que compadecer, hay que hacer propios los sufrimientos, alegrías y esperanzas de los demás. La compasión, la misericordia, te llevarán a compartir los bienes, el tiempo, los talentos, lo que tienes y lo que eres.
5º Muerte al yo
Desde la misericordia y el amor, ya no vivas para ti, sino para el otro. Pierde tu vida, para poder guardarla. Hazte pequeño, pobre, nada. Únete a Cristo en la cruz.

Creado por el P. Igancio Prado. S.M.

martes, 13 de junio de 2017

HOY...

DESDE EL ATEÍSMO



No hay absolutamente nada positivo que una creencia religiosa aporte y que no pueda ser alcanzado mediante el ateísmo, lo institucional y la mejora de la propia personalidad por medios psicológicos. Nada, excepto el consuelo del mito de la vida después de la muerte.Usar ese mito para alcanzar todo lo demás crea complicaciones innecesarias. Solo una absurda soberbia puede sostener que una herramienta con tantos requerimientos y exigencias es la única manera de sostener una ética.La religión es más que el opio del pueblo. Demasiado a menudo, es la inercia de un sistema que no acepta otras opciones. No obstante, las inercias de ese sistema han aportado innumerables maravillas a la humanidad. La religión debe ser admirada por ellas. El cristianismo, por ejemplo, ha aportado dos grandísimas virtudes, a cuál más necesaria y hermosa: el perdón y la caridad, ambas en contra de la falacia de la meritocracia y la competitividad. El amor al prójimo, mediante el reconocimiento no despreciativo de sus debilidades y de las nuestras, es el avance más grande de la historia de la humanidad. Pero no necesitamos el lastre del mito del origen para desarrollar esas virtudes.Por otra parte, el odio a la religión no tiene sentido, como no tiene sentido odiar a un estudiante que aún no controla su potencialidad. Que la religión provoca grandes males es tan cierto como que provoca grandes bienes. No se trata de odiar a los creyentes, sino de hacer ver que no es necesario creer en mitos sobre el origen para mejorar el mundo.El problema se encuentra en la inconsistencia de sus principios cuando no se es creyente, en esa construcción de interpretaciones del mundo y de atajos innecesariamente complicados para mejorar las sociedades y a los individuos. Apelar a uno o más seres imaginados por culturas antiguas para mejorarnos es innecesario y trae consigo digresiones que contaminan los procesos de madurez.A menudo se ha vinculado la contienda entre religiosidad y ateísmo con la pugna entre espiritualidad y materialismo, una pugna que no tiene que ver necesariamente con las construcciones religiosas. Desde el ateísmo pueden entenderse sin problemas conceptos como «amor», «dignidad», «justicia», «institución», «solidaridad», «empatía», «compromiso», «sacrificio», «aceptación», «valentía», «respeto», «humildad», «trascendencia». Solo un ignorante limita el ateísmo a conceptos como «pragmatismo», «egoísmo» o «inmoralidad». Ser ateo no es «estar perdido» ni «ser un oportunista». Es no necesitar un intermediario para amar al prójimo.No considero que haya que acabar con las religiones, ni mucho menos prohibirlas porque sean innecesarias. Cada uno cree en lo que estima oportuno. Pero apoyarse en ellas para construir un mundo mejor —y, desde luego, exigir que tengan una constante presencia incluso entre quienes no las comparten— me parece completamente superfluo e incluso nocivo, por las implicaciones e inercias que arrastran y que pueden superarse. Si por medios institucionales y personales —que casi todos podemos emplear— alcanzamos fines éticos —que todos podemos compartir—, ¿por qué exigir que se haga desde otros mundos?Creo firmemente que debemos estudiar religiones, incorporar al ateísmo todo aquello que han aportado y que tanto bien han hecho por las personas. Es una locura dejar de estudiar las religiones y despreciarlas. Es contrario al propio concepto de humanidad y un acto de ignorancia despreciar lo que puedan enseñarnos un imán o un rabino sobre los problemas humanos. Por el contrario, ¿debemos aceptar que sus enseñanzas solo pueden ser defendidas desde construcciones míticas aún tomadas como reales? Innecesario y peligroso.Construir una sociedad desde conceptos como «superioridad innata», «privilegios», «desprecio al débil», «resignación» o «sumisión» es lo que debemos desechar. Resulta muy difícil, por no decir imposible, sostener y mejorar esta sociedad sin tales vicios mientras lo hagamos depender de instituciones y obligaciones religiosas. La respuesta al caos y a la vacuidad no es la imposición ni la proyección indemostrable. Es la empatía, es la institución como fuerza orientadora, es la comprensión, el análisis, la aceptación de la realidad material, la proyección cuidadosa a partir de los modelos propuestos por el arte y por la filosofía.Fui catequista cuatro años. Fui educado por franciscanos, cuya filosofía ha aportado algunas de las más hermosas miradas al mundo que he conocido. Mi familia es muy católica y, por supuesto, excelentes personas. Por ello y por muchos más motivos, sé que muchísimas personas religiosas en España —sacerdotes o no— hacen un gran trabajo día a día, un trabajo con el que ayudan a que el mundo sea mejor. No se trata de permitirles o no seguir, sino de construir junto a ellos cuanto esté en nuestras manos. Se trata de respetarnos mutuamente.Sin embargo, no debe aceptarse que la base por la cual llegan a sus buenas acciones sea potenciada ni tomada como verdad desde las instituciones laicas. Demos medallas a personas o grupos de personas, sean sacerdotes, órdenes religiosas, ONGs o, por supuesto, ateos. Las personas son modelo de comportamiento. Las construcciones míticas son símbolos literarios no compartidos, mediante las cuales canalizar, proyectar, representar modelos éticos. Desde el ateísmo, solo son herramientas. No tiene sentido poner una medalla a una herramienta, mientras hay personas a las que apoyar. La institución —la universidad, el municipio, el Estado, el juzgado— debe quedar por encima de las creencias de cada cual y premiar tan solo comportamientos de personas, pues hay muchísimas, muchísimas personas ateas o religiosas con nombres y apellidos que necesitan urgentemente medallas, reconocimiento público, recursos materiales y emocionales.¿Se quiere apoyar a una comunidad, entender el sentir de una población, empatizar con ella? ¿Se quiere demostrar que no se desprecia a nadie por su religión? Habrá un sacerdote o una congregación a quien agradecer o apoyar sus esfuerzos.

Somos una comunidad. Busquemos qué nos une desde modelos éticos que todos podamos compartir.


Fernando Angel Moreno

Artículo publicado en Huffington Post

domingo, 11 de junio de 2017

HOY... EL EVANGELIO (Jn 3, 13-18)

MISTERIO


Esta fiesta nos habla de Dios, pero: ¿más de cómo es o de quién es? Nos parece remitir, a lo que Él ha realizado en nosotros y en el mundo, por medio del Hijo y del Espíritu. La pregunta parece ser: ¿dónde está, dónde se le ve?, y no hay otra respuesta, que en la propia historia personal y la del pueblo. En ella descubrimos el sentido de la existencia, del dolor, de la enfermedad, de la muerte, de nuestra presencia en el mundo, del camino que debemos recorrer. Y por ello, podemos proclamar: “Creo en Dios”, no como una idea, sino como una experiencia, que llamamos experiencia de fe.

Dice la primera lectura del Éxodo: “Si he obtenido tu favor, que mi Señor vaya con nosotros, aunque ése es un pueblo de cerviz dura; perdona nuestras culpas y pecados y tómanos como heredad tuya”. Nuestro Dios, es un Dios cercano, es lo que Jesús le cuenta a Nicodemo: “Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único, para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna”. Más aún: “Porque Dios no mandó a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él”. En estos tiempos de búsqueda, en que cuesta tanto captar la presencia de Dios, se puede creer o no creer en el Hijo, pero él seguirá caminando con su pueblo, ha bajado de su nube, como decía Martín Descalzo: “a tomar la tortilla con nosotros”.

Si vivimos en el temor, el miedo al castigo o a la ley o sólo confiamos en la ciencia, el dinero, el prestigio…, es difícil sentirse hijo de Dios. Si nos dejamos llevar por el Espíritu, podremos llegar al Hijo y a sentirnos hermanos del Hijo, sin olvidar lo que dice San Juan: “Si decimos que amamos a Dios y no amamos a los hermanos, somos unos mentirosos”. Amando a los demás hombres como hermanos, reconocemos la presencia de la Trinidad en nuestras vidas, una Trinidad que es comunidad y fraternidad. Lo dice San Pablo a los Corintios en la segunda lectura: “Alegraos, trabajad por vuestra perfección, animaos; tened el mismo sentir y vivid en paz. Y el Dios del amor y de la paz estará con vosotros. Saludaos mutuamente con el beso santo”. Los cristianos somos trinitarios, es decir comunitarios, creemos en un Dios con tres personas, un Dios en relación.

Posiblemente, es el Amor de Dios, que se recoge, continuando la carta de San Pablo, todos los días como saludo al comenzar la Eucaristía: “La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo esté siempre con vosotros”, es la mejor fórmula para expresar el Misterio. Misterio que no hace referencia a algo intelectual, sino a algo que nos desconcierta, es la presencia de alguien que viene a nuestro encuentro por que es regalo- exigencia, comunicación, afecto, apertura, entrega, unión, alegría, vida, verdad, pero en persona y en personas. Esta fiesta resume nuestras búsquedas y la experiencia de ese Dios amor, que no sabemos cómo, da sentido y dirección a toda nuestra vida.

sábado, 10 de junio de 2017

HOY... INFORMACIÓN

COLEGIO SUPERREGIONAL


El pasado fin de semana se celebró el Colegio Superregional de los Equipos de Nuestra Señora en el incomparable marco de la casa de los Hermanos Capuchinos de El Cristo del Pardo. Unos dáis para valorar el curso finalizado y poner las bases del intenso curso próximo, con Fátima como horizonte. Jornadas con momentos de debates, de oración, de trabajo, de relajación y de dos aspectos que hacen a los ENS algo diferente: acogida y colegialidad.


Es una experiencia extraordinaria poder estar en estos encuentros, donde se puede observar el carisma del Movimiento, de ser protagonistas de primera mano en las decisiones que afectan a todo el colectivo, siempre desde el respeto y la búsqueda del bien común, como parte de una Iglesia a la que pertenecemos y a través de la cual ofrecemos nuestra presencia en el mundo.   






CyJ

viernes, 9 de junio de 2017

HOY...

HAY UNA MUJER ...



... que tiene algo de Dios por la inmensidad de su amor, y mucho de ángel por la incansable solicitud de sus cuidados. 

Una mujer que siendo joven, tiene la reflexión de una anciana y en la vejez trabaja con el vigor de la juventud.

Una mujer, que si es ignorante, descubre con más acierto los secretos de la vida que un sabio, y si es instruída se acomoda a la simplicidad de los niños.

Una mujer, que siendo pobre se satisface con los que ama, y siendo rica, daría con gusto sus tesoros por no sufrir en su corazón la herida de la ingratitud.

Una mujer que siendo vigorosa, se estremece con el llanto de un niño, y siendo débil se reviste a veces con la bravura de un león.

Una mujer que mientras vive no la sabemos estimar, porque a su lado todos los dolores se olvidan, pero después de muerta daríamos todo lo que poseemos por mirarla de nuevo un solo instante, por recibir de ella un solo abrazo, por escuchar un solo acento de sus labios.

De esa mujer no me pidas el nombre, si no quieres que empape en lágrimas el pañuelo... esa mujer yo la vi por el camino. Es mi madre!

De esa mujer no me exijáis el nombre si no queréis que empape con lágrimas vuestro album, porque ya la vi pasar en mi camino. Cuando crezcan vuestros hijos leedles esta página y ellos, cubriendo de besos vuestra frente os dirán que un humilde viajero ha dejado aquí, para ti y para ellos, un boceto del retrato de su madre."

Autor: Ramón Angel Jara, Obispo chileno y canónigo argentino

jueves, 8 de junio de 2017

VERANO



Verano, ya me voy. Y me dan pena 
las manitas sumisas de tus tardes. 
Llegas devotamente; llegas viejo; 
y ya no encontrarás en mi alma a nadie. 

Verano! Y pasarás por mis balcones 
con gran rosario de amatistas y oros, 
como un obispo triste que llegara 
de lejos a buscar y bendecir 
los rotos aros de unos muertos novios. 

Verano, ya me voy. Allá, en setiembre 
tengo una rosa que te encargo mucho; 
la regarás de agua bendita todos 
los días de pecado y de sepulcro. 

Si a fuerza de llorar el mausoleo, 
con luz de fe su mármol aletea, 
levanta en alto tu responso, y pide 
a Dios que siga para siempre muerta. 
Todo ha de ser ya tarde; 
y tú no encontrarás en mi alma a nadie. 

Ya no llores, Verano! En aquel surco 
muere una rosa que renace mucho...

César Vallejo



miércoles, 7 de junio de 2017

HOY...

Sagrado Corazón de Jesús
En Vos confío

Oh Señor, mi dulce amigo, cuatro cosas
hoy te pido por mucha necesidad
Paciencia para sufrir
Fuerza para trabajar
Valor para resistir las penas que han de venir
y me han de mortificar
Temperamento sereno
para poder resolver las cosas con santa calma
Y así tener el alma perfecta
tranquilidad
Eso tengo que pedirte, oh mi Jesús
adorado en este día consagrado
para adorarte y servirte por siempre
Amén

lunes, 5 de junio de 2017

HOY...

ESPÍRITU 


¿Escuchas ese Rumor

con susurro de oleaje?

esa voz es el lenguaje

del Espíritu de Amor.

Es una brisa, un aliento,

un inefable gemido

¿Escuchas ese sonido

que late en el firmamento?

Es el Viento y es la llama

del Espíritu de Amor…

¿Escuchas ese Rumor

que te nombra y te reclama?


Ángel García-Rayo Luengo, Pbro.


“Nuestra madre la Iglesia, con sus festividades, nos lleva de la mano para que nos alimentemos con los pastos saludables de la gracia, presentándonos en cada festividad algo que nos mueva a practicar la virtud. Ya que nuestra santa madre la Iglesia es tan pródiga en alimentar a sus hijos con tan exquisitos alimentos, aprovechémonos de estas verdades, enseñadas con el ejemplo de tan sabio Maestro como lo es nuestro Señor”.

Santa Ángela de la Cruz.

domingo, 4 de junio de 2017

HOY... EL EVANGELIO (Jn 20, 19-23)

ESPÍRITU SANTO



Cincuenta días después de la noche de Pascua, celebramos la fiesta de Pentecostés. En los textos de las lecturas de este domingo, aparecen las condiciones para poder acoger al Espíritu de Jesús:

Primero: Estar reunidos: “Todos los discípulos estaban juntos el día de Pentecostés”, “Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos”. No sólo reunidos, sino unidos: “En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común. Porque, lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo”. La comunidad, es el símbolo de la presencia del Espíritu y el sueño del Reino que quiere reunirnos a todos en una mesa común, como veremos siguiendo las reflexiones de los textos. Solo nadie puede salvarse, ni llenarse de la fuerza del Espíritu.

Segundo: Hay que hacer y tener una experiencia de encuentro y acogida, que los que la tienen, la describen así: “En esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: Paz a vosotros. Y, diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor”, “De repente, un ruido del cielo, como de un viento recio, resonó en toda la casa donde se encontraban. Vieron aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se repartían posándose encima de cada uno. Se llenaron todos del Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas extranjeras, cada uno en la lengua que el Espíritu le sugería”. Y es, que como dice San Pablo a los Corintios: “Nadie puede decir Jesús es Señor, sino es bajo la acción del Espíritu Santo”. Sin esa paz, que irrumpe como lenguas de fuego o agujeros del costado, no podremos sentir a Jesús como dueño de nuestras vidas, no podremos superar el miedo.

Cuál sería la experiencia, para que aquellos apóstoles asustados y escondidos, tuvieran la valentía de salir a la calle, a anunciar que Jesús había resucitado, sabiendo que en ello les iba la vida, como así sucedió. Pocos estamos dispuestos a dar la vida por una idea, incluso por una persona, algo pasó en el interior, la presencia del Espíritu, es un viento huracanado que lo transforma todo, bien se lo dijo Jesús a Nicodemo.

Tercero: Somos enviados a todos: “Como el padre me ha enviado, así también os envío yo”, a los judíos y griegos, esclavos y libres, partos, medos, elamitas, de Mesopotamia, Capadocia, del Ponto, Asía, Frigia, Panfilia, Egipto, Libia, Cirene, Roma, Cretenses y árabes… Ya no hay torre de Babel, en la que cada uno habla su propio idioma, todos entienden el lenguaje del amor. Nosotros, debemos vivir nuestra vida ordinaria en estado de misión, cuando conversamos con un amigo, nos comprometemos en algo social, cumplimos en nuestro puesto de trabajo, en todo debe estar presente el sentirnos enviados.

Y cuarto: Para realizar esta misión contamos cada uno con una serie de dones, que hemos de poner al servicio de toda la comunidad: “Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de servicios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común”. Por eso, es hoy el día de la Acción Católica y el Apostolado Seglar. Las parroquias, movimientos apostólicos y grupos cristianos, aportamos desde nuestros ambientes, dones y carismas, lo necesario para construir una Iglesia que es comunión y en la que cada uno asume sus responsabilidades.

Pentecostés inicia el tiempo de la Iglesia. Si el Espíritu nos ha congregado en esta Eucaristía, ahora nos envía, para que seamos en todas partes los testigos de una novedad: es posible saltar las barreras del individualismo y del miedo, para compartir la misma fe, el mismo pan y la misma lengua. Salgamos a anunciar que el Espíritu del Señor, renueva y repuebla la faz de la tierra.
Julio César Rioja, cmf

HOY, EN LA SANTA IGLESIA CATEDRAL DE VALLADOLID SE CELEBRARÁ LA VIGILIA DE PENTECOSTÉS A LAS 21:00 HORAS, PRESIDIDA POR EL SR. OBISPO AUXILIAR